(VIDEO) Neeskens: muere el más uruguayo de los holandeses

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Por Andrés Alburquerque
Actualizado el 8 de octubre de 2024 - 1:12 am

Junto a Johan Cruyff formó una dupla irrepetible e inconfundible. Y dónde uno aportaba la magia y la fantasía, el otro sumaba temperamento y una fuerza irreprimible.

Por ANDRÉS ALBURQUERQUE F. / Fotos: AGENCIAS y ARCHIVO

El neerlandés Johan Neeskens falleció este lunes, a los 73 años. El ex volante se encontraba en Argelia al momento de su muerte. Sufrió una descompensación mientras trabajaba en un proyecto de la Federación de Fútbol de Países Bajos…

Pero, ¿quién fue Neeskens?

Habrá que decir que si Cruyff era el talento, Neeskens era el temperamento. Si uno ponía el corazón, el otro, el alma. Como el yin y el yan, formaban una dupla prodigiosa, equilibrada, casi perfecta.

Cryff y Neeskens en el Barcelona.

Era muy fácil distinguirlos. Si Johan Cruyff era más bien moreno de pelo pegado en melena, su tocayo destacaba en el campo por su larga y rubia cabellera.

Usaba Neeskens, además, unas inconfundibles tobilleras blancas. Pero lo que más destacaba de su juego era su agilidad, compromiso, dinámica y garra al más puro estilo “charrúa”.

La estética no era lo suyo. Eso lo dejaba para los que tenían más capacidad técnica, que no abundaban precisamente en la Holanda de los ’70. Como un huracán en mitad del terreno, el bueno de Johan (que no mataba una mosca), era una fuerza irreprimible. Una barredora de fuego. Aunque también era capaz de devolver una pared con precisión o desbordar y lanzar un centro. Fútbol total, le decían.

Nació el 15 de septiembre de 1951 y destacó por su dedicación y profesionalismo. Comenzó su carrera en 1968 como lateral derecho en el club de su localidad natal, el Racing Club Heemstede, de la segunda división holandesa.

Partido Argentina-Holanda. Neeskens se anticipa a Ardiles en un duelo cargado de elegancia.

Dos temporadas más tarde, Rinus Michels lo fichó para el Ajax, club en el que logró notables éxitos. Allí ganó tres Copas de Europa consecutivas (1971, 1972 y 1973), una Intercontinental, dos títulos de Liga y dos Copas de la Federación.

Pero donde más brilló fue en la emblemática selección holandesa finalista de los mundiales de Alemania 1974 y Argentina 1978. En la primera fue dirigido por Michels, considerado el “inventor” de la Naranja Mecánica.

Así le pusieron por el estilo de juego fluido, veloz y agresivo, que cautivó a la afición y cambió el fútbol para siempre.

En clubes, Neeskens siguió los pasos de su amigo Cruyff y fichó por el Barcelona, donde jugó cinco temporadas, pero apenas ganó una Copa del Rey y una Recopa de Europa. Dueño de una buena pegada y especialista en penales, anotó 57 goles en 232 partidos oficiales.

Antes de colgar los botines, jugó en clubes de menor tonelaje. En EEUU (New York Cosmos, Minnesota, Strikers y Kansas), Países Bajos (Gröningen) y en el FC Baar y el FC Zug, ambos de Suiza.

El hincha (en esos años en Chile comenzamos a ver partidos vía satélite) lo recordarán por sus tacles perfectos, su solvencia defensiva, su innegable potencia. Por eso no es exagerado decir que Cruyff fue la estrella de esa generación, pero Neeskens corrió por él para que brillara más.

Final del Mundial de 1974. Minuto 2, Johan Neeskens abre la cuenta ante Alemania.

Vea un gol de Neeskens a Brasil en Alemania 1974: