Susana Jiménez se convierte en la primera mujer en asumir como presidenta de la CPC

La ex ministra de Energía en el segundo gobierno de Sebastián Piñera, Susana Jiménez, se convirtió en la primera mujer en asumir como presidenta de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) en sus 90 años de historia.

Daniel Más, empresario y representante de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) asumió la vicepresidencia y Macarena Letelier será la gerente general de la organización.

Los seis principales grupos empresariales del país que reúne la CPC votaron unánimemente a favor de Jiménez este martes. Estas empresas son las siguientes: Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Cámara Nacional de Comercio (CNC), Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) y Cámara Chilena de la Construcción (CChC).

Sobre la importancia de presidir este gremio, Jiménez afirmó que «soy la primera mujer en presidir esta institución y siento el peso de esa responsabilidad. Sin embargo, no llegué acá por ser mujer, sino por la llamada de una vocación que me llevó a estudiar y trabajar con ahínco, así como a servir a nuestro país como empresaria, dirigente gremial, funcionaria de gobierno, docente, y también como madre»

En la experiencia laboral de Jiménez destaca haber sido consejera y vicepresidenta de la Sofofa, y durante tres años fue directora del BancoEstado. Además, es ingeniera comercial egresada de la Pontificia Universidad Católica.

Desarrollo económico y vocación empresarial

La economista señaló que “al desarrollo económico sólo se llega de la mano de la libertad, del emprendimiento, de la inversión, de la innovación y el trabajo duro».

Asimismo, Jiménez indicó los pilares del compromiso empresarial. “El progreso no se alcanza a través de impuestos excesivos, la burocracia o los subsidios, no hay nada más solidario que ser eficiente y no hay nada que le dé más dignidad a las personas que un trabajo estable y remunerado. Ambas cosas constituyen la esencia de la vocación empresarial”.

La empresaria finalizó su discurso diciendo que “la sociedad necesita tanto buenos empresarios como buenos políticos y, sin duda, espera de ambos no sólo su mejor esfuerzo, sino la capacidad de colaborar para que, desde sus respectivos ámbitos, seamos capaces de sumar nuestros aportes a mejorar la calidad de vida de nuestros compatriotas”.