Serie sobre Matute Johns genera gran polémica
Los hermanos Pablo y Juan de Dios Larraín están en pleno rodaje de una serie sobre el crimen de Jorge Matute Johns para Netflix, pero la familia del malogrado joven pide a la productora Fábula que no se usen los nombres reales.
Las grabaciones de la serie ya comenzaron / Foto: AGENCIAS
La polémica que se generó a raíz del último trabajo de la productora cinematográfica llegó hasta tribunales. Los hermanos Pablo y Juan de Dios Larraín se encuentran en el rodaje de su última serie para Netflix, nada más y nada menos que sobre el remanido caso Matute Johns, que hace ya veinte años remeció al país como uno de los crímenes más espeluznantes de ese tiempo. El crimen fue en 1999 y el cuerpo apareció en 2004; hasta el día de hoy no hay condenados.
La polémica surgió porque en la serie se están utilizando los nombres reales, lo que generó gran molestia de parte de la familia. Ellos piden que el rodaje quite los nombres reales y, en última instancia, que la producción no se realice.
Además de los efectos legales que esto pudiera traer y del evidente conflicto moral que supone, lo que tal vez no se ha mencionado es el fondo de la cuestión: la vieja reyerta entre ficción y realidad.
¿Nombres reales o ficticios?
Las películas basadas en hechos reales siempre son una adaptación de la misma. A veces se utilizan nombres ficticios, otras veces los nombres reales. Esta filia por la coincidencia entre ficción y realidad es muy particular de nuestra época, y quizá tenga que ver con el morbo de contaminar la realidad desde la ficción.
Por otra parte, artísticamente, la producción de un contenido como éste pudiera dar cuenta de la falta de creatividad del director chileno, que viene de una pésima película como lo fue “El conde”, donde hay un cruce entre realidad y ficción que tiende hacia lo fantástico.
La madre de Jorge Matute Johns, Teresa Johns, llegó al Congreso Nacional para protestar contra la serie de Fábula y Netflix, basada en el crimen de su hijo. Los protagonistas son Clemente Rodríguez, quien personificará a Jorge Matute Johns, y Paulina García, que hará el rol de la madre. El resto del elenco son actores recurrentes: Alfredo Castro, Lucas Sáez, Héctor Morales y Camila Hirane.
La familia en pie de guerra
Las declaraciones de la familia fueron las siguientes: “Lo he dicho de todas las maneras posibles, pero me ha dolido profundamente. Esto me ha hecho retroceder, no puedo avanzar”, denunció María Teresa Johns.
“Que hagan lo que quieran, una obra inspirada en los hechos, que cambien algunos detalles y utilicen otros nombres. Pero no pueden usar el nombre de Jorge Matute Johns, ni el de mi madre ni el mío”, señaló a su vez Alex Matute Johns.
Como se ve, el problema no es contra el rodaje, sino que contra el uso real de las personas devenidas personajes. Algo así como un cameo nominal. La madre reclamó a la comisión Cultura de la Cámara de Diputados, asegurando que este rodaje le ha provocado una serie de alteraciones emocionales con las cuales no quiere lidiar para enriquecer a una productora y a una corporación.
Una desgracia no es un capital
En otras palabras, el nombre de su hijo no es un capital de la industria del cine. Pero el conflicto realidad/ficción sigue allí. No deja de ser curioso que una parte de la ficción se pretenda resolver legalmente en la realidad. Quizá esto sea más interesante que la serie misma.
Finalmente, la comisión Cultura de la Cámara de Diputados resolvió enviar algunos oficios para investigar si la serie cuenta con algún tipo de financiamiento público, además de elaborar una declaración de rechazo contra Fábula, que fue convocada para dar cuentas del rodaje.
