Reynero firmó con tinta azul la boleta de Cobresal a la U…
El hijo del excrack de la U, Roberto Reynero, anotó los dos goles en la merecida victoria de los «mineros», frente a un rival que recibió pifias en su reencuentro con los hinchas en Rancagua.
Por CAMILO REY
La vuelta del público al estadio no fue pródiga para la U en Rancagua. A pesar de tanto amor al fútbol que estuvo contenido durante los meses de pandemia, muchos hinchas pifiaron a los jugadores y otros, incluso, insultaron al presidente del club, Cristián Aubert, tras la derrota frente a Cobresal. El meritorio 2-0 de los «mineros» tuvo un nombre y apellido propio que le agrega otra connotación a la cáida de los azules: Felipe Reynero anotó ambos goles, y sacó lustre a un apellido que también fue parte de la U en otro episodio de su hstoria.
El detalle del partido reflejó la dimensión futbolística irregular del equipo de Esteban Valencia, que decayó ostensiblemente y, esta vez, no tuvo la eficacia de Larrivey para compensar sus fragilidades colectivas. Es claro que ese factor fue virtud de Cobresal, un equpo aplicado y aguerrido, con más «fuego» que luces en el juego y que cuenta con un delantero que no figura en la baraja de opciones del rival. La potencia y contundencia de Reynero fue determinante: primero abrió la cuenta cuando el partido recién despuntaba aprovechando un grueso error defensivo de Ramón Arias en la U, y cerró la victoria con un golazo donde zarandeó a la defensa y al portero De Paul antes de clavar el remate para la ventaja final.
La U fue la suma de errores individuales y una baja de funcionamiento evidente, acaso condicionado por el trajín y despliegue de un adversario muy eficiente. Acaso hubo demasiados distracciones previas en la semana de los azules, cuando abundaron los halagos externos e internos para el nuevo gerente deportivo, el ecuatoriano Luis Roggiero, y la renovación de Joaquín Larrivey -con Walter Montillo como negociador del contrato- alcanzó una resonancia desmedida.
El «gerente» goleador de Cobresal
Roberto Reynero jugó diez años, fue marcador lateral y capitán de la U hasta 1991 y registra 257 partidos y 13 goles por los azules. Felipe Reynero es su orgulloso hijo y un delantero de larga trayectoria que pasó por México, entre otros clubes, y destaca en Cobresal no sólo por el fútbol.
Y es que el jugador capitalizó sus ganancias con inversiones que son tan llamativas como su madurez para conciliar la pasión por el fútbol y su claridad con las cuentas. Reynero Junior reconoció en una entrevista reciente que invirtió en diversos negocios y posee cabañas en las termas de Chillán, un hotel en la isla caribeña de Tulum en la Riviera Maya, además de algunas propiedades en Santiago y Concepción.
En rigor, un delantero con las cuentas bien claras, una especie de «gerente» goleador que firmó la boleta de la U a Cobresal…
PORMENORES
Estadio El Teniente. Árbitro: Piero Mazza.
Universidad de Chile (0): Fernando De Paul; Yonathan Andía, Osvaldo González, Ramón Arias, Marcelo Morales; Sebastián Galani (Brandon Cortés 81′), Gonzalo Espinoza, Mario Sandoval; Marcelo Cañete (Pablo Aránguiz 67′); Joaquín Larrivey, Franco Lobos. DT: Esteban Valencia.
Cobresal (2); Leandro Requena; Pablo Cárdenas, Sebastián Silva, Rodolfo González, Francisco Ayala; Cristopher Mesías (Diego Céspedes 85′), Eduardo Farías; Felipe Reynero, Brayan Hurtado (Franco Ragusa 66′); Óscar Salinas (Benjamín Osses 85′), Matías Donoso. DT: Gustavo Huerta.
Goles: Felipe Reynero, 10′ y 93′.