Palmeiras es bicampeón de la Libertadores y afianza la hegemonía brasileña en Sudamérica
En un encuentro nada de brillante el equipo de Sao Paulo venció 2-1 al Flamengo de Mauricio Isla y repitió el título logrado el año pasado ante el Santos.
POR JOSÉ ROGGERO
No fue digno de una final de Copa Libertadores. Menos si sus protagonistas son dos gigantes brasileños. Escaso brillo y mucho cálculo estratégico.
Pero eso poco le importa a Palmeiras, que gracias a dos errores defensivos de su rival -el segundo un regalo envuelto en papel de regalo- derrotó 2-1 a Flamengo y se llevó por segundo año consecutivo la copa a Sao Paulo, festejando de paso su ingreso al selecto grupo de clubes vencedores en tres o más ocasiones.
Ahora el ex club del “Mago” Valdivia y actual de Benjamín Kuscevic -que estuvo en la banca- equipara en títulos a Santos, Gremio, Sao Paulo, Olimpia y Nacional de Montevideo, respira en la nuca a River Plate y Estudiantes de la Plata, con 4 copas, y ya no le parecen tan lejanos Peñarol, con 5, Boca Juniors, con 6, e Independiente de Avellaneda, con 7 trofeos.
Para salir triunfante del Estadio Centenario de Montevideo, el equipo del portugués Abel Ferreira vistió de overol y dejó el smoking para la cena de gala.
Aprovechando el gol de Rapahel Veiga en el minuto 6, el elenco paulista trabajó todo el partido en modo defensivo y no de ataque.
El tanto de apertura fue un símbolo del encuentro. Un pase largo del central paraguayo Gustavo Gómez halló desubicados a los defensas más reputados de esta final, los ex seleccionados David Luiz y Filipe Luis, ypermitió que el lateral Mayke centrara atrás para que el volante Rapahael Veiga fusilara por abajo al portero Diego Alves.
Con la cuenta a su favor, Palmeiras lució su solidez defensiva extendida a un mediocampo bien situado y batallador. En el resto del primer tiempo Flamengo poco pudo hacer. Sobre el final de la etapa tuvo su única chance desperdiciada cuando el uruguayo Giorgian de Arrascaeta no pudo definir en el segundo palo.
El segundo tiempo despertó a los de Río de Janeiro. Sin usar casi las puntas -omisión que dejó a Mauricio Isla sin participación en el encuentro- igual se arrimó por el medio y las ocasiones de gol se sucedieron. Entre el minuto 46 y el 59 Gabriel Barbosa, William Arao, David Luiz y Bruno Henrique marraron cuatro oportunidades claras. En contraste, Palmeiras solo amenazó una vez con un disparo de Rony desviado por Diego Alves.
La constancia y la lucidez ofensiva al fin tuvieron su premio. En el minuto 72, el llamado a ser el jovencito de la película, Gabriel Barbosa, apodado “Gabi Gol”, recibió destapado en la izquierda y encajó un zurdazo en el primer palo aprovechando que el arquero Weverton dejó el espacio justo para el paso del balón.
La igualdad despertó a Palmeiras y el partido se hizo de ida y vuelta. Con el marcador 1-1 hubo que ir a tiempo extra. En el minuto 94 llegó la segunda fatalidad paulista. Situado como último hombre, el volante Andreas Pereira recibió un pase fácil desde el costado izquierdo, pifió al dar la pelota a su arquero y permitió la arremetida del recién ingresado Deyverson, que batió con tiro rasante a Diego Alves.
Lo que vino después fue típico de estas finales. Un equipo desesperado por igualar y otro apelando a lo que sea para que el duelo acabe de una vez. Flamengo arremetió a tropezones y no consiguió más que tiros de esquina estériles ante la solidez aérea paulista.
Palmeiras volvió a brindar, tal como el año pasado. El éxtasis se lo ganó con justicia. Eso es parte de su historia.
A nivel continental, su triunfo refuerza la paulatina hegemonía que está alcanzando Brasil en la Libertadores. Desde el 2011 se ha quedado con siete de las once copas en disputa. Solo el River Plate de Marcelo Gallardo ha roto esta primacía en 2015 y 2018, acompañado por San Lorenzo en 2014 y Atlético Nacional en 2016. Y otro dato más, en igual período 16 semifinalistas provinieron de la tierra de Pelé.
Está difícil obstruir esa hegemonía. En el duelo de hoy ambos elencos hacían gala de jugadores retornados desde Europa. Algunos, es cierto, de vuelta de sus mejores años, pero otros, simplemente jóvenes traídos en un intervalo en sus carreras y ya deseosos de retornar al Viejo Continente.
PORMENORES
Copa Libertadores
Final
Estadio Centenario de Montevideo
Árbitro: Néstor Pitana (Argentina)
PALMEIRAS (2): Weverton; Mayke (105’, Gabriel Merino), Luan, Gómez, Piquerez (112’, Felipe Melo); Danilo (69’, Patrick de Paula), Ze Rafael (81’, Danilo Barbosa); Gustavo Scarpa, Raphael Veiga (90’, Deyverson), Dudú (73’, Wesley); Rony.
FLAMENGO (1): Diego Alves; Isla (78’, Matheuzinho)), Rodrigo Caio, David Luiz, Filipe Luis (31’, René); William Arao, Andrés Pereira (110’, Pedro); De Arrascaeta (110’, Vitinho), Everton Ribeiro (63’, Michael); Gabriel Barbosa, Rui Henríque (90’, Kenedy).
GOLES: 1-0: 6’, Rapahel Veiga (PAL); 1-1: 72’, Gabriel Barbosa (FLA); 2-1: 94’, Deyverson (PAL)
AMONESTACIONES: Gómez, Piquerez y Felipe Melo (PAL); Rodrigo Caio, De Arrascaeta y Gabriel Barbosa (FLA).
Revisa lo mejor de la final: