Milei acentúa la caída libre de su credibilidad con ataques a la institucionalidad

La velocidad con que crece la crisis institucional en Argentina sorprende a propios y ajenos.

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Por Iván Gajardo Millas, desde Buenos Aires
Actualizado el 3 de marzo de 2025 - 6:20 pm

A Javier Milei se le está viniendo la noche / Foto: ARCHIVO

A partir del escándalo de la criptoestafa y la resonancia global que el hecho tuvo en pocas semanas, el presidente argentino Javier Milei aceleró su estrategia de redoblar la apuesta o -como se dice- “cantar retruco”, con el evidente objetivo de desviar la atención e intentar correr el escándalo de la agenda pública.

Sin embargo, a pesar de las campañas digitales emprendidas por su ejército de trolls, el mandatario y su equipo de comunicación no lograron por ahora neutralizar los efectos del escándalo y la credibilidad presidencial sigue en picada mientras las instituciones democráticas del país muestran preocupantes signos de deterioro.

Un tuit bisagra

Hasta antes del viernes 14 de febrero a las 19:01, Milei podía ufanarse de una serie de logros políticos durante el primer año de su gobierno, varios de ellos discutibles, pero al menos muy arraigados en la agenda nacional e internacional.

Había construido una imagen de infalibilidad y no pocos sectores ultraderechistas del mundo lo empezaban a erigir como una especie de gurú económico, un outsider que venía a revolucionar la política y a combatir “la casta”.

Sin embargo, el que a tuit mata a tuit muere y el aún no esclarecido involucramiento del libertario en la criptoestafa descomunal de $LIBRA acaparó la tapa de periódicos y revistas de todo el mundo, modificó el tablero político y puso a Milei entre las cuerdas.

En la medida en que el sacudón de la estafa multiplicaba sus réplicas en el resto del mundo, el mandatario sugirió en una entrevista de TV que sería su ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona quien se encargaría de su defensa, pero esa decisión suponía admitir que se lo acusaba por algo relacionado con el ejercicio de la presidencia y no a título personal, que es la versión que él buscaba instalar.

Voltereta judicial

Corregido el lapsus e intentando mostrar un gesto de transparencia, instruyó a la Oficina Anticorrupción (OA) para intervenir en la investigación, lo que fue criticado porque terminaría en una auto-investigación, pues el titular del organismo es un ex socio suyo. Por último designó a la jefa de gabinete de asesores de su cartera, María Florencia Zicavo, frente a una denominada Unidad de Tareas de Investigación (UTI).

En el Congreso en tanto, Milei logró frenar la creación de una comisión investigadora sobre el tema, lo que hizo aun más inverosímil que la OA avance en «investigar» al presidente y otros funcionarios.
Y para blindar cualquier opción que se le escapara, logró que la Corte Suprema tomara la insólita decisión de rubricar la designación de jueces de ese cuerpo por decreto al tomarle juramento a Manuel García-Mansilla, contraviniendo el texto constitucional, ya que es la Cámara la que debe dar su acuerdo, con una mayoría especial a los miembros del más alto tribunal de justicia del país.
Para ello, forzó una interpretación de la Constitución argumentando que la demora del Senado en aprobar los pliegos enviados a la Cámara hace 8 meses constituyen una razón suficiente para que el jefe del Estado los designe sin el acuerdo de nadie.
No hay constitucionalista que apoye esta teoría ni párrafo de la Constitución que determine que si el Senado demora el acuerdo, el Gobierno puede nombrar por decreto jueces de la Corte, señalaron los detractores de la decisión.

La Constitución en vilo

Recientemente, Milei anunció su intención de forzar la intervención de la provincia de Buenos Aires y la remoción por decreto de su gobernador, el ex ministro de Economía Axel Kicillof.

No está claro si fue un exabrupto o si ya decidió posicionar al gobernador como su rival político de acá a las elecciones de 2027, pero lo cierto es que el hecho logró aglutinar a todo el arco peronista (que venía bastante desperdigado) alrededor de la figura del economista, una de las espadas más jóvenes y populares del peronismo.

El sábado en la noche, durante la apertura de sesiones ordinarias del Congreso en un recinto parlamentario semivacío por primera vez en 40 años de democracia, tras la decisión de la oposición de ausentarse del acto, el mandatario apenas sobrevoló el escándalo que lo golpea por la cripto-estafa y ocupó su tiempo en insultar opositores y desplegar un listado de triunfos de su gestión que, de acuerdo a la prensa local, estuvo plagado de datos falsos o difíciles de chequear.

Vetos a la prensa y agresión a parlamentario

El acto realizado con un fuerte dispositivo de seguridad y la prohibición a la prensa de sacar fotografías culminó con un escándalo luego que el diputado radical Facundo Manes, que durante el acto mostraba la Constitución como modo de protesta, fue amenazado por Santiago Caputo, uno de los hombres más poderosos del Gobierno y el alfil comunicacional del libertario. El diputado además fue golpeado por uno de los acompañantes de Caputo, aseguró el legislador.

Coscorrón estadounidense

Durante las siguientes dos horas de terminado el acto, los canales de noticias cubrieron profusamente este hecho y dejaron de lado el discurso del mandatario, lo que desató las feroces críticas, incluso de los periodistas más cercanos a la Casa Rosada.

Mientras todo esto ocurría, el encargado del presidente estadounidense Donald Trump para América Latina, Mauricio Claver-Carone, declaró que la estafa con $LIBRA «es una buena lección para Milei», que el escándalo financiero podría convertirse en un serio obstáculo para la relación a futuro entre Washington y Buenos Aires y que Estados Unidos investigará lo ocurrido debido a la gran cantidad de ciudadanos estadounidenses que fueron sido estafados.

CFK se sube al ring nuevamente

La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner lanzó duros dardos el domingo contra Milei, en un mensaje en su cuenta de X en el que enumeró las dificultades que tuvo que atravesar el

«Che Milei… ¡qué semanita!… Desde la tapa de Forbes, diciendo que armaste ‘La mayor cripto estafa de la historia’, a la del New York Times contando que la estafa es de 250 millones de dólares, y que además había que pagar coimas para reunirse con vos”.(..) Y vos que pensabas que eras un rockstar mundial, mirá cómo terminaste… estafador global, rodeado de coimeros locales», escribió con sorna la ex mandataria.