La Roja de a poco recupera la sonrisa
La Selección arrancó el ciclo de Reinaldo Rueda con una merecida victoria 2-1 en su visita a Suecia. El equipo chileno, que mostró algunas caras nuevas, dominó a un cuadro que dirá presente en el próximo Mundial.
Hay varias cosas que destacar en esta vuelta de página luego de la eliminación para Rusia 2018. Chile no sólo se paró de igual a igual ante el equipo que dejó sin Mundial a Italia, sino que dominó las acciones en la mayor parte del amistoso disputado en Estocolmo. Mostró mucho compromiso de los jugadores, tomándose el partido harto más en serio que varios otros amistosos de esta generación.
Y en ese compromiso, los rostros de siempre se pusieron el overol: Arturo Vidal, el emblema del sacrificio de este equipo, nunca bajó las revoluciones a pesar de que no había puntos en juego. Fue el propio volante del Bayern Münich el autor del primer gol (22’), con una hermosa definición de un jugador que trasuntó mayor jerarquía que todos los suecos juntos.
Hasta la apertura de la cuenta Chile jugaba mucho mejor, sumando volantes y laterales en ofensiva. Rueda comenzó con un 4-2-3-1, que funcionó muy de mediocampo hacia adelante, pero con algunas confusiones en el fondo que se vieron reflejadas en el empate que llegó luego de la reanudación. La sucesión de pases desorientó a una retaguardia que quedó mal ubicada y que sólo se conformó con ver la definición de Ola Taivonen (23´).
Desde ese momento el encuentro entró en un pozo. Alexis, lejos del área intentó ayudar a Vidal en la gestación, pero no pudo destacar en la primera etapa, al igual que el escaso aporte del único delantero nominal: Eduardo Vargas. Por parte de los locales, el que intentaba hacer algo distinto era Forsberg, que con su habilidad logró generar algunas faltas cercanas al área que luego terminaron en nada.
En el fondo, la dupla de centrales respondió. Enzo Roco y Guillermo Maripán jugaron por primera vez juntos en la Selección, mostrando mucha personalidad, especialmente el defensa del Cruz Azul. Por momentos, especialmente por las subidas de Isla y Beausejour, se vieron mal parados, pero en el balance ambos jugadores de más de 1,90 respondieron.
Pero en el complemento Chile definitivamente se adueñó del partido, no sólo a partir del monopolio en la posesión, sino por la insistencia reiterada por batir a Nordfeldt, el que comenzó a ser exigido fundamentalmente a partir del ingreso de Nicolás Castillo. El delantero del Cruz Azul aportó presencia en el área. Además probó un par de veces a portería y buscó asociarse con Alexis Sánchez, y en uno de esos encuentros lo dejó cara a cara con el portero. En el rebote apareció Marcos Bolados, que había ingresado algunos minutos antes para volantear por el sector derecho, pero en esa jugada –ya cuando el partido terminaba- se animó a pisar el punto penal y encontrase con el balón para decretar el triunfo (90´).
Seguramente el nominado que generó mayor sorpresa por su intermitencia en las últimas temporadas, pero Rueda vio algo en el antofagastino que finalmente terminó aportando la victoria.
Chile se despide de Suecia aprobando el primer examen de la era Rueda. Al menos el partido fue tomado con mucha seriedad, cosa que hace algunas semanas –luego de la renuncia del capitán y las dudas de Alexis- parecía improbable.
Pormenores
Estadio Friends Arena de Solna, Estocolmo, Suecia.
Público: 48.134 espectadores
Árbitro: Anthony Taylor (Ing)
Suecia (1): Kristoffer Nordfeldt; Mikael Lustig (81’ Johan Larsson), Nilsson Lindelof, Andreas Granqvist, Martin Olsson; Víktor Claesson, Sebastian Larsson (79´ Oscar Hiljemark), Gustav Svensson, Emil Forsberg (79´ Ken Sema); Marcus Berg, Ola Toivonen.
DT: Janne Anderson
Chile (2): Johnny Herrera; Mauricio Isla (79´ Paulo Díaz), Enzo Roco, Guillermo Maripán, Jean Beausejour; Charles Aránguiz, Pedro Pablo Hernández (61´ Diego Valdés), Arturo Vidal, Ángelo Sagal (71´ Marcos Bolados), Alexis Sánchez; Eduardo Vargas (61´ Nicolás Castillo).
DT: Reinaldo Rueda.
Goles: 0-1: 22′ Arturo Vidal (CH); 1-1: 23′ Ola Toivonen (Sue); 1-2: 90′ Marcos Bolados (CH).
Tarjetas amarillas: Lustig (Sue); Vidal e Isla (Chi)