Juegos Deportivos Nacionales y Paranacionales 2024: volvieron para quedarse
Entre el 22 de septiembre y el 5 de octubre se llevaron a efecto en la región de La Araucanía los V Juegos Deportivos Nacionales, con 15 deportes, y los III Juegos Deportivos Paranacionales, con 6 paradeportes. Las sedes de Temuco, Villarrica, Padre Las Casas y Pucón albergaron a 3.000 deportistas de la categoría adulta de las 16 regiones de Chile.
Por PEDRO LIRA BIANCHI / Fotos: AGENCIAS
En términos generales, los Juegos Deportivos Nacionales y Paranacionales implicaron dos competencias en una que tuvieron, en general, una buena puesta en escena para los 8 meses con que se contó para realizarlos. Por ello, un reconocimiento a los organizadores, especialmente al Instituto Nacional de Deportes de la Región de La Araucanía, cuyo director, Mauro Salinas, encabezó un equipo multisectorial que sacó adelante el evento deportivo más grande hecho en la historia de esa región del país.
Hubo cómodos alojamientos en la hotelería local de cada sede, alimentación, transporte y un sistema de salud sin problemas y acorde a las exigencias. En cuanto al nivel deportivo que se pudo apreciar, de antemano se sabía que habría fortalezas y debilidades. Chile aún tiene amplias brechas que acotar en el deporte de rendimiento, en todas las regiones, incluyendo la Metropolitana, que ha ganado las 5 versiones de estos Juegos, en 2013, 2015, 2017, 2019 y ahora la del 2024.
Justamente para acotar brechas, pulir procesos, mejorar las competencias en cada región, lograr más y mejores coordinaciones entre todos los involucrados y expandir y lograr avances técnicos en la masa crítica de deportistas de rendimiento, es que se están realizando este tipo de eventos.
Entonces, de lo experimentado en La Araucanía en los últimos 15 días se pueden extraer conclusiones positivas. Algunas de ellas:
Primero, el costo del evento fue de $3.500 millones de pesos (3.6 millones de dólares), recursos que tienen que ser tomados como una inversión y no como un gasto. El Instituto Nacional de Deportes (IND) colocó $2.000 millones, el gobierno regional de la Araucanía puso $1.000 millones y la Municipalidad de Temuco, $500 millones, en un excelente esfuerzo conjunto.
Segundo, su organización muestra un trabajo en equipo y una conveniente coordinación entre diferentes niveles de gobierno y organizaciones deportivas nacionales y locales.
Tercero, los Juegos Nacionales y Paranacionales se volvieron a realizar luego de cinco años, período en blanco en alguna parte justificado por la pandemia del covid, pero también porque no se le había tomado el peso suficiente a la importancia que tienen en cuanto descentralización de la actividad, además de la continuidad y seguimiento en relación a un muy necesario proceso de desarrollo deportivo de las regiones y de Chile.
Cuarto, el evento se vio favorecido por un importante aumento de competiciones, subiendo de 8 a 15 en deportes convencionales y de 4 a 6 en paradeportes, además de que tomaron parte varios seleccionados de Chile de distintos disciplinas, quienes participaron en los Juegos de Santiago 2023 y París 2024.
Y quinto, un reconocimiento también a la Región de La Araucanía y al Comité Olímpico de Chile (COCH). La primera, a través del alcalde de Temuco, Roberto Neira Aburto, quien solicitó en el 2023 llevar eventos deportivos nacionales o internacionales a la región para darle una mirada constructiva a esa zoma del país; el COCH tomó el bastón, lo propuso al Ministerio del Deporte y al IND y la idea se concretó.
Para percatarnos de la mirada regional de estos Juegos, vale la pena conocer la opinión sobre estos eventos del actual director regional del IND Región de O´Higgins, Juan Bustamante, quien lleva más de 25 años trabajando en torno al deporte regional, tanto en su lugar de origen como también en las regiones de Los Ríos, Valparaíso y en las oficinas centrales del IND en Santiago.
Cinco son los temas que Bustamante rescata. Primero: como estos Juegos no se hacían desde el 2019, es muy conveniente que se hayan vuelto a realizar porque son uno de los pedestales para el desarrollo deportivo de Chile.
Segundo: es una instancia motivadora para cada región pues permitirá trabajar a través de procesos conducentes a mejorar resultados.
Tercero: es muy positivo que tanto el COCH como cada federación, los organismos oficiales de cada deporte, estén muy involucrados en estos Juegos, porque no era así en versiones anteriores.
Cuarto: sin duda estos eventos deben ir mejorando aspectos técnicos como, por ejemplo, los procesos selectivos y/o la nominación de deportistas que representen a cada región. Estoy seguro que en cada versión futura se mejorará este tipo de decisiones.
Y quinto: es el deseo de todos que estos Juegos se desarrollen cada dos años, tendiendo en cuenta que la periodicidad y continuidad de estos puede implicar un salto cuantitativo y cualitativo, como ha sucedido en otros países que los han desarrollado.
En cuanto los medalleros de los Juegos Nacionales y los Juegos Paranacionales, estos muestran algunas realidades que ayudan a mirar y mejorar el futuro del evento y, especialmente, la realidad de regiones.
- Previo a los Juegos, se sabía que la Región Metropolitana ganaría ambos eventos y por una ventaja considerable. Sin embargo, la distancia con el resto de las 15 regiones fue menor a la esperada. De los 15 deportes y una disciplina de los Juegos Nacionales convencionales, la Región Metropolitana ganó en 8 (atletismo, pesas, tenis, judo, natación, taekwondo, karate y balonmano).
A su vez, Los Ríos triunfó en gimnasia rítmica; Araucanía, Los Lagos y Los Ríos ganaron el básquetbol 3×3 y 5×5; Ñuble y Biobío vencieron en tenis de mesa; en rugby 7 lograron el oro Arica y Parinacota en damas y Metropolitana en varones; en ciclismo y bicicross lograron un oro O´Higgins, Biobío, Arica y la Metropolitana; en tenis de mesa lograron un oro Ñuble, Biobío y Los Lagos.
- Sobre el medallero de los Juegos Paranacionales, una de las conclusiones que se pueden extraer es que más allá de lo positivo que es este tipo de evento para deportistas con otras capacidades, el que se hayan distribuido 170 medallas de oro, 114 de plata y 68 de bronce, está mostrando una disparidad que no es sana ni conveniente porque que en muchas pruebas sólo compitieron una, dos o tres personas, lo que no desmerece a quien obtuvo las preseas, pero la realidad indica que también distorsiona el sentido de lo que es un medallero.
En estos casos, a futuro, el reglamento respectivo debiera indicar la cantidad mínima de deportistas a competir.
En el evento paranacional las distancias fueron menores: la Región Metropolitana ganó dos paradeportes (básquetbol en silla de ruedas y natación), mientras que Biobío triunfó en atletismo y powerlifting, La Araucanía triunfó en tenis de mesa, y en el goal boal los triunfos fueron para Valparaíso y Metropolitana.
- Si se observa el medallero general de los Juegos Nacionales, las regiones de Valparaíso, La Araucanía, Biobío y Los Lagos aparecen como bastante parejas. En eso puede influir la cantidad de población en cada región, siendo las más pobladas luego de la Metropolitana, como también tener más organizaciones deportivas y un sistema de competencias más desarrollado, nacional como internacionalmente.
Los Juegos Cristo Redentor de las regiones centrales de Chile y las provincias centrales de Argentina, como los Juegos de la Araucanía, de las regiones sureñas de Chile y Argentina, que se hacen todos los años desde 1994 en adelante, pueden estar influyendo positivamente en estos actuales resultados.
- Hay otro grupo de regiones, sureñas y centrales, como Magallanes, Los Ríos, Maule, O’Higgins y Aysén, que están en un tercer grupo, pero no tan alejadas del segundo.
- Sin embargo, todas las regiones del norte, desde Arica y Parinacota, pasando por Tarapacá, Atacama, Coquimbo y Antofagasta, están bastante más rezagadas. A ellas se suma la región central-sureña de Ñuble, la más nueva y la que tiene los mayores índices de pobreza del país.
En estos seis casos la situación es para preocuparse más y debieran tomarse medidas especiales para evitar este atraso. Es posible que en el caso de las regiones del norte esté influyendo el que éstas se quedaron sin los Juegos de la Juventud desde hace al menos 5 años, evento que era internacional entre Chile, Argentina, Bolivia y Perú. Si ese diagnóstico es parte del problema, las autoridades tendrán que ver la solución que pueda haber para paliar la falta de roce internacional.
De acuerdo al analista del Comité Olímpico de Chile, Marcelo Ubal, estos medalleros son una radiografía de lo que sucede en cada región con su sistema deportivo, conformado por organizaciones como los clubes y asociaciones, el vínculo entre éstas y la inserción de las mismas con la comunidad y las autoridades deportivas regionales, quienes son las que dirigen los programas que existen para apoyar el desarrollo en este ámbito.
En concreto -afirma Ubal- es muy posible que estos medalleros den cuenta de las regiones que tienen un mejor y más coordinado su sistema deportivo, versus las regiones que están desprovistas de un sistema idóneo.
Sumando y restando, bien por los Juegos Nacionales y Paranacionales. Ahora, el ideal es que se decida lo antes posible la sede de la sexta versión y ojalá ésta se haga en el 2026. Hay mucho avanzado y mucho más por hacer. El beneficiado final será el deporte chileno y todas las regiones del país.
El medallero de los Juegos Nacionales:
El medallero de los Juegos Paranacionales:
