Iglesia Católica argentina le quitó apoyo a la conocida “Sanadora de Rosario”

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Por El Ágora
Actualizado el 20 de octubre de 2024 - 1:00 pm

La popularidad de Leda Bergonzi, la “Sanadora de Rosario”, ha venido a la baja por varias situaciones, entre ellas, la que le significó su expulsión por parte del Arzobispado de su ciudad, que la acusa de “alejarse del camino de la fe”.

Por CRISTIÁN CARRIÓN / Foto: ARCHIVO

Leda Bergonzi, también conocida como la «Sanadora de Rosario», ha perdido mucha popularidad debido a una serie de controversias en su entorno. En su punto más alto, a finales de 2023, multitudes esperaban en fila para participar en sus ceremonias, y se rumoreaba que la madre de Lionel Messi también seguía sus enseñanzas, según indican algunas fuentes.

En ese apogeo mediático que vivía, efectuó una visita a Chile, reuniendo a cerca de seis mil fieles en el Templo Votivo de Maipú, y la misma cantidad en la Gruta de Lourdes en Quinta Normal, manteniendo una estrecha conexión con la Iglesia de Rosario, que le permitía organizar sus reuniones en templos y parroquias.

Sin embargo, en septiembre de este año, la Iglesia Católica decidió desafectarla, alegando que había dejado de lado la fe “para concentrarse en su propio éxito”.

Bergonzi se defendió afirmando que era una «purificación de carismas» y afirmó que seguiría con sus rituales, aunque fuera de la diócesis de Rosario, según indica el diario La Nación de Argentina.

Además de abandonar la Iglesia, la curandera se enfrenta a una acusación por estafa presentada por su ex productor, Alberto Castillejo.

De acuerdo a dicha denuncia, Castillejo habría pagado hasta 2 millones de pesos (argentinos) a Bergonzi por cada presentación, en su intento de iniciar una carrera musical cristiana, pero los espectáculos no lograron atraer a la audiencia esperada.

Leda Bergonzi, a su vez, rechazó las acusaciones y explicó que los trámites para consolidar la fundación no se completaron debido a la desconfianza generada en su entorno. Además, afirmó que los encuentros eran financiados con su propio dinero y el de su comunidad.

Pese a todo, la sanadora aseguró que, si es invitada por otras diócesis, no tendrá problemas en seguir llevando a cabo sus actividades de sanación.