Esther Pineda llenó el Zócalo de Recoleta en la Filcs 202
Con un audiencia desbordada, la feminista venezolana Esther Pineda presentó su libro “Morir por ser mujer”, donde aborda el sexismo y la violencia estética contra las mujeres.
Por SEBASTIÁN GÓMEZ MATUS / Foto: GENTILEZA
En el contexto de la Feria Internacional del Libro de Ciencias Sociales, Filcs 2023, con una convocatoria única, se presentó Esther Pineda, investigadora y académica feminista afrovenezolana, quien abordó temas que todavía están siendo producidos por el sistema neoliberal y el simbolismo arcaico que ve a las mujeres como objetos y reproduce las prácticas que continúan esta visión.
Fue una charla candorosa y con una perspectiva crítica sensible, combativa desde la sensibilidad que genera el pensamiento y la efervescencia de la palabra en vivo.
Para nadie es tabú lo que está ocurriendo en el país: una olla de grillos. Por todos lados el país está haciendo agua y la crisis migratoria se transformó en una crisis de seguridad, ambos discursos planteados por las fuerzas políticas que han producido la crisis en la que vivimos o intentamos vivir.
La Filcs es un evento único y de radical postura frente a los acontecimientos que tienen al país en una esquizofrenia social. Basta recordar el concepto de máquinas deseantes, de Deleuze y Guattari. El deseo (y con ello el sexismo y la violencia de género a través de la estetización de los cuerpos femeninos, entre otros cuerpos) responde a una producción y reproducción de deseos maquinales o maquínicos, donde las máquinas funcionan con flujos materiales continuos, encierran una ilusión y territorializan el deseo.
Hoy, más que nunca, Chile es una especie de territorio hiperdeseado. La parvada político-empresarial hace rechinar sus colmillos en las oficinas donde se decide qué hacer con Chile.
No pudo haber sido más oportuna la Filcs 2023 junto con la presentación de Esther Pineda, que no desconoce la situación migratoria de sus compatriotas (por favor, entendamos que hoy “migración” es un eufemismo de “flujos de capital humano”). La población venezolana en Chile fue importada por la derecha y se les esperaba en estos guetos verticales que responden a la depredación inmobiliaria que ha terminado por destruir la belleza de nuestra ciudad.
Es en estas instancias, como la charla de Esther Pineda, pero también en el hecho de que esté presente y pueda compartir físicamente con otras mujeres y audiencia en general, muestrra donde se pueden construir espacios de decolonización y deconstrucción de las binariedades que detentan al mundo. Hablamos de las clases sociales, de los partidos políticos y de la disciplina de los cuerpos en tanto género. Según expresó en la conferencia, Pineda propone “el concepto de violencia estética, que es física, psicológica y social, porque tiene consecuencias económicas, laborales, en la forma en la que nos relacionamos con otros. Esta forma de violencia se construye a través del discurso, representaciones, interacciones e instituciones sociales, que han intervenido en la concepción de belleza y en la forma que respondemos a los ideales de belleza”.
En el fondo, se trata de combatir los estereotipos de belleza y las construcciones sociosexuales de la mujer, pero también de los hombres y de la cultura Lgtbq+, cuyo filocapitalismo no deja de sorprender, sobre todo en relación a su supuesta crítica de género al sistema que les discrimina. Por supuesto, no generalizo, pero ojo. Éste es un tema que no se puede discutir en un artículo.
La charla de Pineda da para establecer líneas de discusión lejos de discursos y políticas biempensantes, sino que a través de comunidades micropolíticas, aunque la tentación es decir: micropoéticas, donde la disidencia, a través de cómo construimos nuestra imagen y la imagen del otro, pasa por un lenguaje que los discursos políticos y sus políticas culturales no pueden pillar. Como señala el Tao: hablar raramente es conforme a la naturaleza.
Continúa Pineda: “Si hay una sociedad que sigue siendo hostil, discriminatoria e invasiva con los cuerpos de otras personas, siempre va a tener un impacto psicológico y físico sobre las personas. Cuando reproducimos esa idea de que ´el problema eres tú´ estamos avalando la continuidad de esa violencia y esa discriminación”.
Sería interesante, a partir de esta visita, poder generar instancias de diálogo y discusión, entre comunidades, barrios, disidencias, lejos de partidos políticos, entre chilenxs y venezolanxs. Con la hostilidad ambiente que se respira, con las consecuencias a tope del gran cucutazo establecido por la derecha, encabezada por el innombrable ex presidente, se vuelve necesario que como comunidad, como ciudadanos, nos acerquemos y conversemos para acortar brechas ideológicas o bien para ampliarlas. Eso está por verse. De momento, no podemos dejar que los medios de comunicación hagan de nuestras vidas un espectáculo, como lo han hecho siempre, sólo que hoy el perno se ha rodado.
Está hecha la invitación para seguir asistiendo a esta gran Feria, instancia única en relación al contexto del país.
Hoy lunes, a las 15:00 horas se presenta el libro “50 años de Chile insular: trazados para una poética”, a cargo del poeta-vecino Andrés Ajens, Carolina Pezoa, Antonio Letelier, Date Fájales y Margarita Bustos.
A las 19:00 se presenta la ponencia “El futuro en disputa”, con Boaventura Sousa y el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue. A las 20:20 cierra el día el trío de jazz Núcleo.