Columna de Rodrigo Cabrillana: Miguel Piñera, el empresario

A los 70 años dejó de existir un particular rostro de la música nacional. Reconocido por ser el cantante de “Luna llena”, canción que le abrió camino en los escenarios locales, el productor y también hermano del ex Presidente Piñera, falleció producto de la leucemia.

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Por Rodrigo Cabrillana
Actualizado el 1 de marzo de 2025 - 12:33 pm

Falleció Miguel Piñera, artista de vocación y bohemio por naturaleza. Foto: ARCHIVO

Alrededor de las cinco de la tarde de este viernes, las redes sociales explotaron con una trágica noticia: fallecía Miguel “Negro” Piñera. Artista de vocación, bohemio por naturaleza y familiar directo del también fallecido ex Presidente Sebastián Piñera. Reconocido en la comunidad musical por “Luna llena”, un one-hit wonder que sonó en algunas radioemisoras durante la década de los ’80.

Sin embargo, musicalmente, ¿quién era Miguel Piñera? Al momento de escribir esta columna, desconozco mayormente su trayectoria artística. Busco referencias en plataformas de streaming y aparece un puñado de canciones que apenas escucho me resultan algo flojas y decido no seguir repasándolas. Acto seguido, me pregunto nuevamente: ¿cuál es su trascendencia cultural?

Programado por Pirincho Cárcamo

Mientras investigaba para “El Espíritu de la Radio”, el libro que narra de manera coral la biografía del divulgador musical Sergio Pirincho Cárcamo, me encontré con algunos testimonios que mencionaban a Miguel Piñera. Fue uno de los numerosos músicos locales que eran parte de la programación del “Hecho en Chile”. Sí, el connotado espacio que el emblemático conductor tenía en Radio Galaxia en los años de la dictadura, tocaba a Piñera.

“Luna llena” pertenece al álbum Fusión Latina, editado en 1982. Un disco de 14 temas de SyM que tuvo una singular importancia en los años en que las producciones locales eran muy escasas.

Sin embargo, “Luna llena”, que es la canción por la que se hace mención al “Negro”, no cuenta con muchos simpatizantes. Más bien es un precedente de lo democrático que era Pirincho en su programa, en el que les daba cabida a todos los cantautores nacionales. Allí, Piñera también tuvo su minuto de fama.

Una canción de Nelson Araya

Ahora, investigando para este artículo me entero también que “Luna llena” no es de la autoría de Piñera, sino que es un tema original de Nelson Araya, integrante del grupo chileno Agua. De hecho, habría sido durante una permanencia en Brasil donde Piñera habría escuchado la canción por primera vez, en donde habría quedado encantado con la composición y en donde habría decidido registrarla para integrarla permanentemente a su repertorio y discografía. Eso, sin considerar los posibles problemas de derecho de autor que podría acarrear al respecto. Al final llegó a un acuerdo con Araya, pero por un monto bastante exiguo.

De todas formas, mis dudas acerca de su trascendencia musical persisten. Incluso doy con un tema que regrabó de Víctor Jara, “Te Recuerdo Amanda”. Pero siento que ni siquiera cuenta con algo de originalidad en su interpretación y lo abandono a los pocos segundos…

Un semblante de la televisión chilena

Entonces, ¿cuáles son los méritos del “Negro”? Más bien creo que se trata de un personaje “televisivo” que trascendió producto de la anémica farándula nacional.

Siempre estaba asociado en la prensa a polémicos noviazgos con chicas jóvenes y apuestas. O con amistades que tenían un alto poder de influencia en diversos medios, con caras que eran rostros estables de programas de la pantalla chica.

También con negocios que intentaba instalar para continuar con su actividad musical, pero igualmente con músicos que contaban con una importante trayectoria. Por ejemplo, la banda que posteriormente acompañó a Charly García.

Los chilenos de Charly

De hecho, la historia se gesta con la amistad que Piñera y Charly desarrollaron a lo largo del tiempo. En una oportunidad, el guitarrista Kiuge Hayashida, el baterista Toño Silva y el bajista Carlos González, por entonces músicos amigos del “Negro”, se encontraban con él en Estudio 54 hasta donde llega García sin banda de apoyo.

De esa experiencia habría surgido un interesante intercambio musical. Tanto, que el connotado compositor bonaerense llegó a llamarlos para que fueran parte permanente de su staff de músicos en el escenario.

“¿Quién dijo que los chilenos no sirven para nada?”, expresó García mientras tocaba con Hayashida, Silva y González en el Festival de Viña 2003. La unión surgió gracias a los contactos que desarrolló Miguel Piñera durante los años en que irrumpió en la escena musical local.

Despedida de un hippie moderno

Se va un personaje. Se despide una figura del espectáculo local, más que el músico y el cantante que siempre buscó permanecer en el oficio de Piñera. Evidentemente será recordado, porque es parte de la historia. Y también por su apariencia estilo hippie y porque siempre citaba a los músicos chilenos en su repertorio.

O porque estaba en constante actividad musical en locales que eran de su propiedad, por haber sido parte y homenajeado también en el Festival de Viña del Mar, por ser un negociante y productor contemporáneo… Pero donde tampoco hay una trascendencia mayor.

Adiós al empresario y a uno de los rostros más controvertidos de la música chilena. A estas horas de seguro debe estar animando junto a su guitarra y a Sebastián la fiesta en algún recinto del más allá.