Columna de José Ignacio Camus: Entre la crisis ambiental y la oportunidad tecnológica
Nuestra capital, lamentablemente, se ha posicionado como una de las ciudades con peor calidad de aire del planeta, según un estudio de la compañía suiza IQAir.
Por JOSÉ IGNACIO CAMUS / Foto: ARCHIVO
Las dos alertas ambientales declaradas en menos de una semana en la Región Metropolina son un llamado urgente a tomar medidas drásticas. La tecnología y los datos disponibles nos ofrecen la alternativa de transformar esta crisis en una oportunidad para mejorar la salud de la población y proteger nuestro medio ambiente.
Implementar sistemas de monitoreo avanzados es fundamental para mejorar la transparencia y la disponibilidad de información sobre la calidad del aire. Sin embargo, no basta con recopilar datos; es crucial que estos sean accesibles y comprensibles para los ciudadanos. Esto empoderará a la población, permitiéndole participar activamente en la gestión urbana y exigir políticas públicas que mejoren su calidad de vida.
La toma de decisiones basada en datos sobre la calidad del aire y otros factores ambientales debe ser clara y accesible para todos. Los datos abiertos fomentan una cultura de transparencia y responsabilidad, pilares fundamentales para fortalecer la democracia.
La tecnología nos permite recopilar y analizar datos en tiempo real, proporcionando información precisa para guiar la implementación de medidas efectivas y responder adecuadamente a las crisis ambientales.
Asimismo, la nueva Ley sobre Delitos Económicos es un paso positivo hacia la responsabilidad corporativa y la protección del medio ambiente. Las sanciones más severas, que incluyen penas de presidio, inhabilitación para contratar con el Estado y la posible disolución de la persona jurídica, envían un mensaje claro: el daño ambiental tiene consecuencias graves.
Dar acceso a los datos a los ciudadanos y garantizar el cumplimiento de las normas ambientales por parte de las empresas no sólo protege el medio ambiente, sino que también promueve una gestión urbana más eficiente e inclusiva. La tecnología y la transparencia en la gestión de datos optimizan los recursos urbanos, fortalecen la democracia y empoderan a la ciudadanía.
Chile, con sus nuevas leyes que promueven la transparencia y sancionan severamente los ataques al medio ambiente, tiene una oportunidad única para liderar en la creación de ciudades inteligentes y una democracia más robusta. Aprovechemos esta oportunidad para transformar la crisis actual en un futuro más verde, saludable y próspero para todos.
José Ignacio Camus. Founder partner Admiral Compliance