Chile no se amilanó ante los mundialistas
La Selección igualó 2-2 ante Polonia, cuadro que se tomó en serio el amistoso de cara a su participación en Rusia. Cuando parecía que los locales harían sufrir más de la cuenta a la Roja, apareció la reacción de los nacionales para remontar un 0-2.
Ampliar el abanico de jugadores y afianzar su sistema de juego son objetivos que Reinaldo Rueda se debe haber trazado en la antesala de la gira a Europa, que finalizó con la digna presentación frente a Polonia. El 2-2 ante un cuadro mundialista que se estaba despidiendo de su gente constituye todo un mérito para un equipo que busca reinventarse luego del despilfarro que nos dejó al margen de la fiesta que está a días de comenzar.
Especialmente porque la selección de Lewandowski se tomó en serio el desafío, entendiendo que se trataba del último apretón fuerte de cara al debut ante Senegal. El técnico Adam Nawalka no sólo presentó en cancha a sus principales figuras, sino que también exigió sacrificio a sus jugadores, que respondieron presionando la salida chilena.
La Roja ya definió que jugará con una línea de cuatro en el fondo, con la espigada dupla de centrales compuesta por Roco y Maripán como candidatos a la titularidad. Se ven sólidos en la medida que el bloque posterior completo no cometa errores, como los exhibidos en los costados que finalmente costaron los goles polacos. Vegas –primero-, al intentar salir jugando, y Paulo Díaz –después-, superado fácilmente por su sector, permitieron los tantos del local. La retaguardia de Chile ya no cuenta con el auxilio de un volante que eventualmente pueda cubrir los espacios abandonados, como lo hacía Marcelo Díaz en los mejores momentos de la Roja.
Miiko Albornoz, que reemplazó a Vegas cuando apenas iban 34 minutos, sumó puntos para disputar la banda izquierda. Ya no es el zaguero intrascendente de la Copa América de 2015, sino que ahora incluso mostró que puede ser una variante ofensiva, más allá del hermoso gol que significó el empate 2-2 (´56), sino que con otras apariciones como la que terminó con el tanto de Diego Valdés (´38), que conectó de cabeza luego del centro del jugador del Hannover 96. Por el sector derecho Paulo Díaz, pese al error, demostró que puede ser una buena alternativa para Mauricio Isla.
En el arco Gabriel Arias respondió al respaldo de Rueda, que se la jugó por el portero de La Calera y que seguramente lo tendrá en cuenta en caso de que no se solucionen los temas pendientes con Claudio Bravo. Nada pudo hacer con el cañonazo de Lewandowski (´33) ni mucho menos ante el remate a quemarropa de Zielinski (´38), pero tuvo otras intervenciones que ayudaron a mantener el empate.
Delante de la línea de cuatro el entrenador apuesta por dos hombres en la contención, uno de ellos más liberado. Lorenzo Reyes destacó en la gira y seguramente rotará en esa función. Más adelante Rueda establece una nueva línea de tres futbolistas, que se suman al único delantero nominal: Nicolás Castillo quedó en deuda básicamente por su expulsión frente a Rumania. Ante Polonia luchó y siempre fue una preocupación para la defensa, pero erró en una jugada que por los puntos un goleador de su categoría no puede fallar.
Diego Valdés demostró que está entre los jugadores favoritos del entrenador, aunque también dejó claro que tiene que mejorar mucho para transformarse en un futbolista de peso. A pesar de su buen gol de cabeza y un lindo remate de media distancia, al ex itálico todavía le falta para conducir a la Roja. En tanto que Junior Fernández y Ángelo Sagal seguramente figurarán como opciones de cambio por los costados.
La Roja, en consecuencia, termina la gira sacando cuentas alegres, porque se paró con autoridad frente a selecciones mundialistas y además le dio minutos a jugadores que seguramente también sumarán acción en instancias oficiales, como la Copa América de Brasil, el próximo año, y las Clasificatorias para Catar, que también se iniciarán en 2019. Pero antes de eso sabremos si los egos personales de los referentes quedan en segundo plano para definir si todos serán opción para lo que viene.
Pormenores:
Estadio INEA de Poznan, Polonia
Arbitro: Paolo Mazzoleni (ITA)
Polonia (2): Wojciech Szczesny (46′ Lukasz Fabianski), Lukasz Piszczek (46′ Thiago Cionek), Jan Bednarek, Michal Pazdan, Maciej Rybus (82′ Bartosz Bereszynski), Grzegorz Krychowiak, Karol Linetty (46′ Arkadiusz Milik), Jakub Blaszczykowski, Piotr Zielinski, Kamil Grosicki (66′ Jacek Goralski), Robert Lewandowski (74′ Lukasz Teodorczyk).
DT: Adam Nawalka
Chile (2): Gabriel Arias, Paulo Díaz (87′ Francisco Sierralta), Enzo Roco, Guillermo Maripán, Sebastián Vegas (34′ Miiko Albornoz); Lorenzo Reyes, Jimmy Martínez (66′ Ángelo Araos), Ángelo Sagal (81′ José Bizama), Diego Valdés, Junior Fernandes; Nicolás Castillo (87′ Cristián Cuevas).
DT: Reinaldo Rueda
Goles: 1-0: 29′; Robert Lewandowski, 2-0: 33′; Piotr Zielinski. 2-1: 38′; Diego Valdés y 2-2: 56′; Miiko Albornoz.
Tarjetas amarillas: Sebastián Vegas y Ángelo Araos (CH)