A 40 años del caso Degollados: el crimen que estremeció a Chile
En marzo de 1985, tres profesionales fueron brutalmente asesinados en plena dictadura, en un hecho que marcó la historia judicial del país.

Este 28 de marzo se cumplen 40 años del caso Degollados, un crimen que conmocionó a Chile y expuso la brutalidad de la dictadura.
El caso comenzó con el secuestro del publicista Santiago Nattino, el 28 de marzo de 1985. Carabineros lo encañonaron y lo obligaron a abordar un vehículo sin patente.
Al día siguiente, el profesor Manuel Guerrero y el sociólogo José Manuel Parada se encontraban a las afueras del Colegio Latinoamericano, en Providencia. Llegaron tres individuos que los capturaron y los metieron a la fuerza a un vehículo. Un colega de Guerrero presenció el hecho y al momento de querer intervenir recibió un disparo en el estómago. El auto desapareció en dirección desconocida, luego de que otro sujeto desviara el tránsito.
Carabineros tras los homicidios
A los tres ilegalmente detenidos los trasladaron a un cuartel de la Dirección de Comunicaciones de Carabineros (Dicomcar), donde se les torturó. Durante la mañana del 30 de marzo, se les trasladó a la comuna de Renca. Allí los profesionales fueron degollados y sus cuerpos fueron abandonados en un sitio cercano al aeropuerto internacional de Santiago, en Pudahuel.
El caso generó tal alarma pública, que el director general de carabineros, César Mendoza Durán, renunció a su cargo. Luego se supo que la operación de exterminio contra opositores a la dictadura de Augusto Pinochet fue articulada y ejecutada por la policía uniformada.
En 1994, el ministro Milton Juica, tras una larga investigación, determinó que los tres profesionales fueron ejecutados por agentes del Estado. ¿La razón? La militancia en el Partido Comunista y su oposición a la dictadura.
“El Fanta”
El caso Degollados marcó en un hito en la historia de los Derechos Humanos en Chile. Fue, de hecho, una de las primeras sentencias que comprobó la participación directa del régimen en crímenes de lesa humanidad.
Fueron 16 las personas condenadas por el asesinato. Entre ellos cinco tuvieron una sentencia de cadena perpetua. A saber: Guillermo González Betancourt, José Fuentes Castro, Alejandro Sáez Mardones, Claudio Salazar Fuentes y Miguel Estay Reyno.
Sin embargo, todos fueron liberados, a excepción del último, conocido en la jerga del hampa como “El Fanta”. Él cumplía su pena cuando en 2021 murió producto del covid-19.