A 37 años de la explosión de la planta Cardoen en Alto Hospicio
El hecho ocurrió el 25 de enero de 1986, a las 10:30 de la mañana, y dejó 29 muertos y 10 heridos. La empresa fabricaba bombas de racimo que luego eran exportadas a Irak.
Por PEDRO LIENQUEO / Foto: ARCHIVO
Este 25 de enero se cumplieron 37 años de la explosión de la planta Cardoen, que dejó 29 fallecidos y 10 heridos en Alto Hospicio, región de Tarapacá. La fábrica elaboraba bombas de racimo que luego eran vendidas a Irak. El estruendo fue tan gigantesco que se sintió en Iquique, que está a 18 kilómetros del lugar, y aún no se sabe la causa que generó la tragedia.
Los cuerpos de los fallecidos quedaron desintegrados e irreconocibles, por lo mismo, el proceso de identificación fue complejo.
Según un documento de la Vicaría de la Solidaridad, que también recordó el suceso, el material con el que trabajaban los obreros era tan delicado que puede generar un daño en 50.000 metros cuadrados.
La prensa que cubrió el hecho en ese año entrevistó a los familiares y amigos de las víctimas, quienes acusaban que en la empresa había abuso laboral.
“Allí hay una total falta de seguridad, ya que no es posible que trabajadores que manipulan tan delicado elemento permanezcan en su sitio por más de 12 horas. Existe un tiempo límite de trabajo y que por ningún motivo puede exceder de las 8 horas. Estamos reuniendo todos los antecedentes para iniciar acciones legales que correspondan”, dice una nota del diario La Tercera de la Hora, del 26 de enero de 1986, que recogió la Vicaría de la Solidaridad.
El 27 de enero del mismo año El Mercurio mostró la declaración del padre de una de las víctimas, quien aseveró que “tenemos la inquietud y nuestras dudas respecto a las normas de seguridad y si había un ingeniero de esa especialidad en las instalaciones”.
Tras la tragedia, Carlos Cardoen, dueño de la planta, cumplió con algunos compromisos, como seguir pagando los sueldos de los trabajadores fallecidos y costeó los gastos de los funerales. Sin embargo, había prometido crear la fundación “25 de enero” y un memorial, ideas que nunca se concretaron.
La investigación de la tragedia se cerró rápidamente. De acuerdo a una nota de Edición Cero del 2019, se determinó que “no había antecedentes para configurar un delito o cuasidelito”, debido a que “fue un hecho casual con consecuencias desastrosas”.
CARDOEN Y SUS PROBLEMAS CON ESTADOS UNIDOS
En 1994, la Interpol emitió una orden de captura contra el empresario y en 2019 solicitó su extradición, acusado de importar ilegalmente circonio de Estados Unidos, que luego era vendido al gobierno de Saddam Husein durante la década de los 80.
Sin embargo, en 2020, la Corte Suprema de Chile rechazó la petición. “De acuerdo a nuestra legislación el plazo de prescripción de la acción penal ha transcurrido completamente, puesto que como se ha indicado no concurre ningún supuesto de aquellos que provocan su interrupción o suspensión”, afirma el fallo.
Bajo la misma línea, aseveró que “el país requirente ha sido bastante impreciso en su planteamiento de la extradición” y además que “no proporcionó prueba alguna en la etapa probatoria”.
De acuerdo a una publicación del Diario Financiero en julio del 2022, Cardoen en el 2021 acudió a la subsecretaría de Relaciones Exteriores para pedir amparo diplomático. Cabe precisar que la alerta roja emitida por la Interpol contra el empresario está vigente hasta el año 2024.