La pluma maestra de la literatura: muere la periodista Lidia Baltra
A los 86 años, falleció en su residencia y luego de una prolongada enfermedad, la destacada periodista y escritora Lidia Baltra.
En horas de esta tarde se conoció el deceso de la periodista Lidia Baltra Montaner a los 86 años, quien fuera escritora, dirigenta del Colegio de Periodistas y presidenta del Tribunal de Ética. Su velatorio es este lunes 11, desde las 09:00, en la iglesia Santa Gemita (Suecia 3150, Ñuñoa) y el crematorio será en el cinerario del Parque del Recuerdo, a las 15:00.
En el año 2022, Baltra fue reconocida con el Premio a la Trayectoria en Periodismo, Memoria y DD.HH. por su trabajo como periodista y sus constantes labores de defensa y promoción de los derechos humanos, así como la recuperación de la memoria histórica en Chile.
Son muchos los reconocimientos que existen a su haber, pero por sobre todo, fue una figura relevante de la literatura chilena. A lo largo de su vida, dejó un legado invaluable a través de su pluma maestra, convirtiéndose en una escritora reconocida tanto a nivel nacional como internacional.
Sus inicios
Nació el 4 de mayo de 1938 en Santiago. Proveniente de una familia de clase media, Lidia Baltra tuvo una infancia tranquila y rodeada de libros.
Desde una edad temprana, mostró un interés particular por la literatura y comenzó a escribir sus propios cuentos y poesías. Sus padres, reconocidos intelectuales de la época, fomentaron su pasión por la lectura y le brindaron el apoyo necesario para desarrollar su talento.
Durante su juventud se destacó por su inteligencia y su dedicación académica. Se graduó con honores de la escuela secundaria y decidió continuar su educación en la Universidad de Chile, donde estudió Literatura en 1965. Fue en la universidad donde Baltra comenzó a explorar diferentes corrientes literarias y a desarrollar su propio estilo de escritura.
Sus referentes
Sus influencias literarias fueron diversas y abarcaron desde escritores clásicos hasta contemporáneos. Autores como Gabriel García Márquez y Virginia Woolf marcaron su estilo narrativo y su forma de abordar temas universales como el amor, la muerte y la identidad. Además, Baltra se sintió atraída por la literatura latinoamericana y se inspiró en escritores como Pablo Neruda y Jorge Luis Borges.
Es importante destacar que la periodista también se vio influenciada por su entorno social y político.
Destacada y reconocida trayectoria
Luego de realizar un postgrado en la Universidad de Columbia, Estados Unidos, estudió en el Instituto de Altos Estudios Cinematográficos (Idhec) en París.
En su juventud trabajó en las revistas Ecran, Vea y Punto Final.
Además, sumó su trabajó en el diario La Nación a principios de los noventa. Recordadas son sus apariciones cubriendo cultura y espectáculos en TVN y las radios Corporación, UTE y Chilena.
Su aporte en lo gremial
En pleno desarrollo de la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet, fue dirigenta del Colegio de Periodistas.
En aquel tiempo debió apartarse de los medios de comunicación tradicionales para especializarse en comunicación rural. Luego entre 1997 y el 2004 fue presidenta del Tribunal de Ética de la agrupación.
Entre otras labores que desempeñó estuvo su participación en el periódico del Arzobispado de Santiago, La Voz. A esto agregamos el departamento de prensa de la Radio Universidad de Chile.
Su compromiso por los derechos humanos
Figura comprometida con su tiempo y su obra refleja su activismo y su lucha por los derechos humanos. Durante las décadas de 1960 y 1970, Chile vivió un período de agitación política y social, y Baltra se involucró activamente en movimientos feministas y de derechos civiles.
Su activismo se reflejó tanto en su obra literaria como en su participación en protestas y manifestaciones.
El feminismo fue una parte fundamental de su vida y se convirtió en un tema recurrente en su obra. A través de sus personajes femeninos, la escritora exploró las diferentes formas de opresión que enfrentaban las mujeres en la sociedad y abogó por la igualdad de género.
Su enfoque en la experiencia femenina y su denuncia de la violencia de género la convirtieron en una voz influyente en el movimiento feminista chileno.
Sus obras plasmadas en el papel
Finalmente, escribió dos libros sobre comunicaciones. El primero, “Atentados a la libertad de información en Chile, 1973-1987”, mientras que “La prensa chilena en la encrucijada” fue su segundo trabajo.