Mandia Araya: “Me encanta el pop, pero prefiero el sello personal de la experimentación”.

Encontrarse con las canciones de Mandia Araya es toda una instancia de conocer y abrirse a nuevas perspectivas con la música. Si bien llama la atención su vínculo profundo con la música popular, en especial el pop, es la experimentación lo que define más bien su relación con el canto, la composición y el piano.

El Ágora conversó con la artista, que este fin de semana presenta su nueva producción al público.

-Mandia, ¿cómo te inicias en el canto y en el arte de la música?

“A los cinco años vi un videoclip del grupo Roxette en Televisión Española. Vivía en Madrid en esos años, y en ese momento supe que había venido al mundo para cantar. Fue como un recuerdo, una certeza. El hecho que me dedique a la música hoy en día fue gracias a hacerle caso a esa ‘sabiduría infantil’…”.

-¿Cuáles fueron tus motivaciones?

“A los 7 años iba a clases de ballet en el Centro Cultural de Ñuñoa y al salir esperaba a mi mamá afuera de una ventana, donde daban clases de piano. Rezando para que mi madre demorase unos minutos más en llegar. Porque al oír la música sentía corrientes de energía por mi columna y como ésta se expandía en mi cerebro. Eso es lo que quería: ‘clases de piano’, y muy afortunadamente mis padres me escucharon y me compraron un piano. Además de comenzar con clases particulares. Me inicié con 8 años con un amigo recomendado del grupo Mandrácula, que en ese entonces eran mis vecinos. Pero fue un año más tarde que comencé con clases en el Colegio Rudolf Steiner y me lo tomé muy en serio”.

-¿Y tus referencias en la música?

“Tengo dos fuentes de referentes en mi música. Una de ellas es toda la música clásica que aprendí con mi maestra de piano, Mirtha Rojas, durante casi 9 años. Llegué a tocar Sonatinas de Haydn a Arabesque de Debussy, obras de Alberto Ginastera y Piazzolla, entre otros, donde tengo un amor especial por Bach y Béla Bartók.

Pero la música popular siempre me ha acompañado. He escuchado diferentes artistas en distintas épocas de mi vida, pasando por todos los estilos posibles. Desde Mecano en el pop hasta Rolling Stones en el rock. También tuve un amor especial por escuchar a Violeta Parra, Víctor Jara, Luis Advis. Además de descubrir la música tradicional de otros países como India o el flamenco con Lole y Manuel, entre otros. En ese tiempo de casetes era toda una dedicación recopilar música. Cuando entré a estudiar Composición y Mención Canto en (Instituto Profesional) Projazz, toda la música que escuchaba se expandió bastante, conociendo compositores contemporáneos más experimentales como György Ligeti u Olivier Messiaen”.

-¿Qué nos puedes contar acerca de tu trabajo en la música con Mouna y Javiera Mena?

“Si bien toqué mucho con Javiera Mena y salimos de gira al extranjero, en países como México y Argentina, también toqué en escenarios como Lollapallooza. Y lo que más rescato fue el exponerme en el escenario con cotidianeidad, pero, hay bandas donde he tocado que pueden ser menos famosas, y me he sentido más expandida musicalmente. Como Cardias, de Amanda Irarrázabal, o Raúl Zurita con González y Los Asistentes, que son bandas que no tienen las limitaciones del pop. Aunque me encanta el pop, pero prefiero siempre la libertad y el sello personal de la experimentación. De mi banda, Mouna, tengo una apreciación similar a lo anterior. Cuando la escucho, creo que hicimos muy buena música, pero siento que está contenida en el pulso de una máquina”.

-¿Cuál es tu conexión con la naturaleza para componer nuevas mixturas musicales?

“Tengo una conexión con el agua, con su fluidez y su transmutación. Estoy haciendo un trabajo musical donde abro registros akáshicos y me inspiro profundamente. Es una música que está en proceso, pero una parte de este trabajo salió en canal 13C el 25 de febrero de este año, en un programa especial que hizo Silvestre (serie que resalta la interacción de la naturaleza y la música). El movimiento del caos perfecto es armonía pura para componer”.

-¿Cómo es la búsqueda constante que realizas en la música por medio de la voz y el piano?

“Encuentro que este tema es infinito, se habla de que está todo explorado, pero eso es algo personal. Yo no paro de explorar nuevas formas de cantar. Una de mis maestras fue Ana María Meza y justamente nos centramos en explorar todas las cavidades posibles y focos para colocar la voz. Obteniendo como resultado nuevos timbres de mí, como una especie de actriz que interpreta varios personajes con ritmos y energías completamente diferentes. Quizá otra persona ya lo hizo, pero eso no importa, lo que cuenta es que la exploración pase por tu propio canal”.

-¿En qué consiste este nuevo disco? ¿Cómo se llama y cuando se presenta?

“Éste es un EP llamado ‘Retratos’, tiene cuatro canciones compuestas para piano, mi voz y un coro femenino. Este coro fue bautizado como ‘Las Lobas Sirenas’, porque justamente hay un juego experimental en la manera de cantar muy femenina y animalesca. Me acompañan Ámbar Ortega, Valeria Cid, Ángeles Mamani y Amanda Irarrázabal. Se presenta este sábado 26 en Radio Escena, en la calle Maturana 9, Barrio Concha y Toro a las 20:30. Metro República, con un valor de entrada de 7.000 pesos”.

-¿Cómo fue el proceso de componer estas nuevas canciones?

“El proceso de composición y arreglos fue tocando, cantando y grabando las diferentes voces por pistas. No ocupé la escritura como en mucha de mis composiciones, no hice partituras ni particellas. Esta forma es más lenta de montar, pero mucho más orgánica en cuanto a variedad del pulso. ‘Las Lobas Sirenas’ me siguen, y me tome los tiempos que me tome. Fue un proceso de muchos ensayos y resultó todo muy largo, tomando en cuenta que comenzamos el 2018”.

-¿Cuáles son tus planes para el 2025?

“Tengo planeado hacer trámites y postulaciones para poder girar el disco al sur de Chile, ya que ahora estoy residiendo en la Región de Los Lagos. Me gustaría cruzar a Argentina o donde nos lleve el disco. Lo bueno es que las coristas están entusiasmadas en continuar cantando conmigo y en girar. También voy a crear una página web donde pueda vender mi música de forma digital y continuar con mis siguientes ideas musicales. Que son hacer arreglos que incorporen los instrumentos de cuerdas, voces y el espléndido piano que me ha acompañado casi toda mi vida”.