Colo Colo demostró que su alza va en serio
Superó claramente en Collao a la Universidad de Concepción por 2-0 y lo cierto es que el marcador fue incluso mezquino para la capacidad futbolística que exhibieron uno y otro. Este torneo nuestro es tan mediocre, tan nivelado hacia abajo, que el Cacique pudo ser último si perdía y en cambio ahora, a 5 puntos del líder, renacen sus esperanzas de lograr un nuevo título.
Colo Colo estaba más que nunca obligado a ganar y lo consiguió en forma clara y rotunda frente a la Universidad de Concepción. No sólo porque debía ratificar que su alza futbolística, en el Superclásico, no había sido fruto de la casualidad, sino porque los resultados producidos en la fecha lo habrían dejado en la última posición de la tabla en el caso de una victoria del equipo de Ronald Fuentes.
Fue “sólo” 2-0, pero lo cierto es que,sobre todo en la segunda etapa, el cuadro de Pablo Guede fue tremendamente superior a un rival que sólo llevó riesgo a la portería de Villar mediante el servicio de pelotas detenidas. En otras palabras, a nadie que viera el partido le habría extrañado que el Cacique se hubiera retirado del reducto de Collao saboreando una goleada.
Colo Colo sentó supremacía desde temprano sobre su rival. Apenas corrían 9 minutos de juego cuando, tras un lateral, Bolados metió el centro ante el cual fracasó el central Machuca,dejando a Paredes en posición de “cachetear” la pelota para cambiarle la trayectoria y batir completamente a un sorprendido Muñoz.
Sin ahogar la salida del rival, como pretendió hacerlo en las primeras fechas, Colo Colo se para ahora recién en tres cuartos de cancha e inicia su presión en mitad de terreno. Con ello no sólo no desgasta tanto a sus delanteros, sino que conserva un orden que en las primeras fechas se extrañó, porque el cuadro albo era demasiado frágil defensivamente teniendo que cubrir tantos metros de terreno.
El cambio le ha dado resultados a Guede. Porque ya antes de que Paredes estirara las cifras, Colo Colo había tenido dos o tres oportunidades clarísimas de haber vulnerado la valla de Muñoz. A los 16 minutos, tras cortar un avance, Barroso decidió irse en ofensiva, tocó hacia Paredes y corrió a buscar la devolución. El central albo cabeceó muy exigido en el área chica y su remate cruzó el arco sin que pudiera llegar a tiempo Rivero.
Tres minutos después, una buena combinación en campo propio entre Zaldivia y Figueroa se prolongó en un pase profundo del lateral volante hacia Pavez. El centro de este encontró la arremetida de Rivero, pero también el oportuno cierre de Machuca que impidió la conquista del uruguayo.
En el área contraria, por contraste, Colo Colo sólo tenía relativos problemas frente al servicio de balones detenidos. Tiros de esquina, y uno que otro tiro libre, fueron la fórmula de los universitarios penquistas para intentar mejor suerte. Un par de veces Villar debió estar atento para repeler disparos a quemarropa, y cuando ya la primera etapa se iba un cabezazo de Camargo, empalmando un tiro libre de Manríquez, dio contra un vertical cuando el meta paraguayo poco tenía que hacer.
Pero Colo Colo pudo irse al descanso con una ventaja sino decisiva, cómoda. Aumentó a los 38, aprovechando un grueso error del central Portillo, que no pudo controlar un balón que intentó bajar de pecho. El balón le cayó a Bolados que no dudó para meterle el balonazo largo y profundo a un Rivero que escapó solo en demanda del arco. Pudo ser gol del uruguayo, pero este, con una generosidad encomiable y un espíritu de equipo digno de destacarse, prefirió cedérsela a un Paredes que entraba solo por el centro del área.
Si el primer tiempo le había sido favorable, la segunda etapa marcó una supremacía absoluta de Colo Colo en el juego y en la presencia en el área.
Estuvo siempre mucho más cerca el tercer gol albo que el descuento de la U penquista. Muñoz lo evitó en un par de oportunidades repeliendo con las piernas y con el cuerpo remates a quemarropa de Rivero y el Pajarito y, cuando estuvo vencido, contó con la ayuda del travesaño para que la caída frente al Cacique no alcanzara cifras aún más claras y contundentes.
Paredes, desde los doce pasos, optó por reventarle el arco a Muñoz en lugar de ubicar el remate, como lo hace siempre, y su violento disparó dejó temblando el larguero. Luego fue el Pajarito quien, recibiendo del uruguayo, estrelló su derechazo contra el travesaño.
El pitazo final sorprendió a un Colo Colo jugando casi a voluntad y a un rival que seguía jugando sólo por inercia, por la obligación que impone el reglamento.
Colo Colo, ratificando su buena producción como equipo visitante, había sumado tres puntos de oro, que le habían evitado el bochorno de ser último.
Este campeonato es tan mediocre, tan nivelado hacia abajo, que a pesar de sus malos resultados en el Monumental, el Cacique se ubica ahora a apenas cinco puntos del líder Iquique y hasta hay quienes volvieron a colgarle el cartel de candidato.
PORMENORES
Campeonato de Apertura. Novena fecha.
Estadio: Ester Roa, de Concepción.
Público: 15 mil personas, aproximadamente.
Arbitro: Cristián Andaur.
U. DE CONCEPCIÓN: Muñoz; Alarcón, Portillo (46´ Troncoso), Machuca (36´ Flores); Berríos, Lepe, Camargo, De la Fuente; Manríquez; Tarifeño (71´ Meneses), Conti.
COLO COLO: Villar; Zaldivia, Barroso, Baeza; Figueroa, Valdés, Pavez, Rodríguez; Bolados (55´ Araya); Rivero (81´ Ríos), y Paredes (88´ Morales).
Goles: Paredes a los 9´ y 38´.
Incidencia: Paredes falló un penal a los 65´.
Tarjetas amarillas: En la Universidad de Concepción, Muñoz, Berríos y Portillo.