Chapa de campeón: Universidad Católica bajó al puntero y se metió en la pelea

En uno de los encuentros más atractivos del certamen, los dirigidos de Mario Salas sacaron lo mejor del repertorio para revertir dos goles en contra y ganar 4-3 al cuadro de Martín Palermo, que cedió la punta de la tabla. José Pedro Fuenzalida, la figura y jugador sobresaliente del juego, anotó dos goles y empujó a su equipo a una victoria que ilusiona a los Cruzados.

Si todos los partidos del fútbol chileno tuvieran un nivel similar al exhibido en el duelo entre Unión Española y Universidad Católica, tendríamos un campeonato comparable con las mejores ligas del mundo, obviando –por supuesto- las diferencias anexas a lo netamente deportivo. Sin embargo, el gran espectáculo desarrollado en Santa Laura parece ser una excepción en un campeonato de muchas emociones, pero de escasa calidad.

Hispanos y Cruzados entraron a la cancha con la obligación de ganar: los locales para recuperar el primer lugar de la tabla y la visita para seguir con vida en su lucha por el bicampeonato.

Los primeros minutos fueron intensos y con aproximaciones de ambos equipos, pero Unión Española golpeó primerocon goles de la dupla más efectiva del torneo: Carlos Salom (12´) y Diego Churín (26´), ambos con cierta complicidad de la retaguardia cruzada y con vistosas concreciones.

Si el primer gol permitió jugar con mucha comodidad a Unión, el segundo pareció ser casi lapidario, porque a partir de la ventaja el equipo se vio mucho más cómodo en el terreno, bien parado en el fondo y con salidas que siempre generaron peligro. Además, en el primer tiempo los locales contaron con un inspirado Felipe Seymour, que guío al equipo desde atrás, y que además participó en la generación.

Católica pareció grogui, pero nunca tiró la toalla, aunque sí dejó forados en la media cancha que fueron aprovechados para generar las contras hispanas. Jaime Carreño, con mucha personalidad pero también con demasiadas imprecisiones con el balón, jamás se entendió con César Fuentes en la zona de contención.

En esa primera fracción la UC generó poco peligro, más que nada arrestos individuales de Buonanotte, pero en el complemento el panorama fue diametralmente distinto. El descanso le hizo muy bien a Católica, que entró a la reanudación sabiendo que la derrota significaba enfocarse sólo en la Copa Chile.

Mario Salas, entendiendo que la fórmula de lanzar delanteros a la cancha para revertir resultados nunca funcionó, apostó por modificar el mediocampo, una acertada decisión. El ingreso de Carlos Espinosa fue clave en la remontada, porque desde sus primeros toques de balón demostró que estaba inspirado. Antes del descuento de Noir, con una acrobática definición de tijera (61´), el ex volante de Huachipato había generados dos claras ocasiones.

Pero pese al gran nivel mostrado por Espinosa, la figura excluyente fue el “Chapa” Fuenzalida, que en los partidos importantes sigue demostrando que está viviendo el mejor año de su carrera. Asistió a Noir en el primer gol y marcó los siguientes con dos muy buenas definiciones (64´ y 73´).

Parecía que la tarea estaba cumplida, porque Unión se vio desbordada en la etapa final, pese a que pudo haber sentenciadoel partido al minuto de la reanudación. Sin embargo, todavía quedaban emociones en Santa Laura.

Salom ya no estaba en la cancha, porque Palermo lo había reemplazado segundos antes del 2-3, por lo tanto las posibilidades se reducían básicamente a los balones detenidos. Y precisamente un tiro libre derivó en una carambola que le permitió a Scifo decretar la igualdad (81´).

A esas alturas del partido, tal como se había dado, el empate parecía un justo premio para ambos, pero eso no lo entendieron así los protagonistas y fueron por más. Los jugadores de Unión más que celebrar el empate corrieron en busca del balón para reanudar rápidamente, y los futbolistas deCatólica también apostaron por desnivelar sobre el final.

Nicolás Castillo no jugó su mejor partido, pero estuvo en el lugar indicado y en el momento preciso para darle a Católica un triunfo que inyecta mucha confianza de cara al último tramo del certamen. Espinosa, que no se cansó de aclarar el panorama, acarició el balón como pocos lo saben hacer, para asistir al goleador (88´).

Un triunfo que permite a Católica alcanzar a Unión Española y quedar a sólo dos unidades de Iquique, único líder del torneo. A falta de seis jornadas, el gran partido disputado en Santa Laura prendió aún más el emocionante campeonato local.

PORMENORES

Estadio Santa Laura
Árbitro: Jorge Osorio

Unión Española (3): Diego Sánchez; Dagoberto Currimilla, Jorge Ampuero, Lucas Domínguez, Nicolás Berardo (58′ Adrián Scifo); Felipe Seymour (79′ Jason Flores), Oscar Hernández, César Pinares, Pablo Galdames; Carlos Salom (73′ Fabián Saavedra), Diego Churín. DT. Martín Palermo.

Universidad Católica (4): Cristopher Toselli; Stefano Magnasco, Germán Lanaro, Guillermo Maripán, Alfonso Parot; César Fuentes (45′ Carlos Espinosa), Jaime Carreño, Diego Buonanotte (78′ Fabián Manzano); José Pedro Fuenzalida, Ricardo Noir (62′ Fernando Cordero), Nicolás Castillo. DT. Mario Salas.

Goles: 1-0: 12′ Salom (UE); 2-0: 26′ Churín (UE); 2-1: 61′ Noir (UC); 2-2: 64′ Fuenzalida (UC); 2-3: 73′ Fuenzalida (UC); 3-3: 81′ Scifo (UE); 3-4: 88′ Castillo (UC).

Tarjetas amarillas: Currimilla, Saavedra, Hernández (UE); Carreño, Maripán (UC).