Roland Garros: amarga derrota de Nicolás Jarry
En un partido que perfectamente pudo haber tenido otro resultado, el chileno dejó pasar la gran ocasión de alcanzar los cuartos de final de un Grand Slam, al caer con el número 4 del mundo, el noruego Casper Ruud, por 7-6(3), 7-5 y 7-5.
Por SERGIO RIED / Foto: AGENCIAS
Los que pensaron que por el hecho de haberlo derrotado semanas antes en Ginebra, el chileno tenía la primera opción de repetir esa actuación ante el noruego Casper Ruud y llevarse una victoria histórica para nuestro tenis, tuvieron un triste despertar.
Porque es muy distinto jugar un ATP 250 en un pequeño estadio suizo, que enfrentar a un jugador avezado, que conoce muy bien lo que es estar en uno de los escenarios más grandes e imponentes del mundo, algo que para el noruego no es nuevo, ya que fue finalista en esta misma pista en 2022, cayendo con Rafael Nadal y ese mismo año, perdiendo la final del US Open ante Carlos Alcaraz.
El chileno, en cambio, pisaba por primera vez en su carrera la sagrada arcilla del Phillipe Chatier.
Esto, que pareciera ser un simplemente detalle, resultó determinante en la derrota de Nico, aunque Jaime Fillol, de todos modos, debe sentirse orgulloso de lo hecho por su nieto en París. Porque alcanzar la segunda semana de un Grand Slam es sólo para los elegidos.
EL PARTIDO
Ya desde el primer game se pudo prever lo que sería el resto del partido, porque Jarry tuvo cinco ocasiones de quiebre a su favor y las dilapidó. Y esa siguió siendo la tónica del partido, con un Nico adelante en el marcador, cometiendo muchos errores no forzados, teniendo poca consistencia en su servicio y fallando en momentos clave, lo que lo llevó a un tiebreak. Una definición en la que él es un especialista, pero que está dejando de serlo, habiendo perdido uno con Tommy Paul en el partido anterior y éste con Ruud, por 7-3.
A remar contra la corriente en el segundo set. Un set que fue otra gran frustración para nuestro nunero uno, que estuvo a un punto con su saque, de ponerse 4-1 arriba y dejó pasar la ocasión, cediendo su servicio y finalmente la manga por 7-5, merced a un nuevo quiebre de su saque en el empate a 5.
Ante este cúmulo de errores de su rival, el noruego no hizo más que aprovechar tanta gentileza, y pese a estar siempre en desventaja en el score, logró recuperaste y tras quebrar una vez más en décimo game, se llevó la etapa y el partido en un nuevo 7-5.
En resumen, un torneo y una temporada sensacional de Nicolás Jarry, quien no sólo escala a nuevas alturas en el ranking y se embolsa importantes sumas de dinero, sino que, además, deja abiertas las ventanas de par en par para nuevos éxitos.