El irrepetible legado de Wayne Shorter
No terminábamos de acostumbrarnos a sentir la pérdida del tremendo y vanguardista guitarrista inglés Jeff Beck, el 10 de enero de este año, cuando nos enteramos de la partida de otro maestro. De los grandes.
Por ARTURO RODRÍGUEZ HERRERA
Se pueden escribir infinidad de argumentos para explicar lo que el saxofonista Wayne Shorter (1933-2023) significó en la música de Jazz pre y post Miles Davis, comenzando de la mano de uno de los mejores de las “grandes ligas”, John Coltrane. Y de Art Blakey.
Resulta ser este apadrinazgo de Coltrane, la llave maestra de su historia musical, para terminar siendo fichado nada menos que por el mismo Miles, quien vino a revolucionar al ya revolucionario jazz con lo que se ha venido en denominar el post-bop.
Esto no fue de extrañar ya que Davis se encargó siempre de rodearse de la crème de la crème de la familia musical del mundo. Si no que lo digan visitas ilustres que tuvimos por estos lares como Jean Luc Ponty, Mike Stern, Dave Holland, Billy Cobham, Chic Corea y John Mc Laughlin por nombrar algunos. Y, cómo no, el tecladista Joe Zawinul.
Shorter y Zawinul fueron parte de esa experiencia musical que se llama “Bitches Brew”, LP concebido en 1970 y que vino, literalmente, a quebrarnos la cabeza. Más que explicarla, esta obra cumbre se escucha. Y se disfruta. El disco explica todo lo que aún estaba por aparecer en el universo de la música avant-garde de entonces. En simple, la onda jazzística que la llevaba.
En la sinigual década ’70, que musicalmente bajo mi perspectiva no ha tenido réplicas hasta hoy (da para otra columna), se creó, produjo y editó lo mejor de la música moderna dentro de un crossover de estilos y tendencias que marcó la industria con el recurrente “antes y después de”.
Y no es menor.
El grupo nacido por el liderazgo del tecladista y del saxofonista en aquella década, Wheather Report, justifica por si solo estas lineas, dado que su extensa discografía liderada por el álbum “Heavy Weather» (1970) y el particularísimo y sensible aporte de Wayne Shorter en ellos, nos habla de eximios solistas y una suma de etnias. A los ya nombrados, se suman el mítico bajista Jaco Pastorius (quien reemplaza al checo Miroslav Vitous); Peter Erskine y Omar Hakim, bateristas; Airto Moreira (Brasil) Manolo Badrena (Puerto Rico) y Alex Acuña (Perú), percusionistas.
En un álbum sin desperdicios, se destaca el track “A remark you made” por estar una interpretación de Wayne Shorter más que sublime.
Para terminar no podemos dejar de mencionar la pista “Footsprints”, cuya autoría es de este eximio saxo tenor y soprano, es quizás el tema más versionado universalmente por infinidad de bandas de jazz que se precien de tal.
Cuando vayas al próximo concierto de Jazz, pídesela al grupo o solista.
Y te acordarás de Wayne Shorter.
