Así da gusto: caleranos y viñamarinos pusieron toda la carne en el asador
Casi tres mil personas disfrutaron de un encuentro lleno de emociones, a ratos desordenado, eso sí, pero que tuvo un final para verlo de pie.
Por SERGIO ANTONIO JEREZ / Fotos: PHOTOSPORT
Claro que muchos dirán que por momentos no podían dar tres pases seguidos, que algunos perdían la pelota rápidamente, que no hubo jugadas de exquisita técnica. Es verdad, pero nadie salió del Nicolás Chahuán calerano lamentando haber gastado dinero en una entrada para ver un espectáculo que no llenara las expectativas.
Todo lo contrario. Porque Unión La Calera y Everton ofrecieron un duelo de guapos, de ambiciosos, lleno de derroche físico, de ganas, de voluntad, y, lo mejor de todo, con cinco goles que aportaron emoción a raudales.
Tanto fue el despliegue, que varios terminaron acalambrados, entregando lo último de resto físico, fruto de una entrega sin pausas, ni tibiezas.
Es cierto que las instrucciones del nuevo jefe de los árbitros, Roberto Tobar, de darle continuidad al juego, de evitar el cobro de faltas intrascendentes, de obviar caídas más cercanas a la simulación que a un golpe de verdad, conllevan cierta permisividad arbitral que, si no es bien entendida, puede terminar mal. Porque hay infracciones que merecen la amarilla, pero Héctor Jona se las saltó, prefiriendo mostrar dos cartulinas por reclamos, a Torgnascioli de Everton y Passerini de Unión La Calera.
Y no es que todo ello fuera idea de Jona, porque en el encuentro de Ñublense y Magallanes advertimos el mismo criterio.
Gana el espectáculo, es cierto, pero ojo, que la mala leche no puede quedar impune.
TRES MOMENTOS
El análisis futbolístico habría que dividirlo por tres. Los primeros minutos fueron del visitante, que perfectamente pudo ponerse en ventaja con un remate de Pastrán que dio en el horizontal luego del manotazo del meta Otárola. Y por ahí anduvo cerca Sacha Sáez de castigar a su ex club.
Pero pasado el chaparrón, los caleranos no perdonaron. Orellana, Gaete y Freytes pusieron el 3-0 antes del término del primer tiempo, dejando la impresión que todo estaba sentenciado.
Sin embargo, el tercer capítulo se escribió con tinta azul en fondo amarillo, porque los cambios de Meneghini en el descanso surtieron efecto y Everton se adueñó del trámite. Lamentablemente para las pretensiones viñamarinas, los goles tardaron demasiado, pese a su dominio. Porque la defensa local aguantó hasta los 82’ –descuento de Sáez- y sucumbió más aún a los 90+9’ –con el golazo de Riquelme-, pero ya no había tiempo para más.
El equipo cementero sumó sus primeros tres puntos y espera tener la misma suerte el sábado 4 ante Magallanes, de visita, y el viernes 10, contra Curicó Unido, en su casa. Los evertonianos siguen en el fondo de la tabla, sin unidades, esperando recuperarse con Unión Española, el sábado próximo de visita, y con Coquimbo Unido, en el Sausalito el sábado 11.
PORMENORES
Campeonato nacional, segunda fecha.
Estadio: Nicolás Chahuán, La Calera.
Público: 2.973.
Árbitro: Héctor Jona.
Unión La Calera (3): F. Otárola; H. Lópes, T. Asta-Buruaga, J. P. Freytes; F. Salinas, W. Alarcón, L. Díaz; C. Pérez; J. C. Gaete, L. Passerini, N. Orellana. DT: Gerardo Ameli. Cambios: 68’, E. Valencia por Gaete; 74’, P. Flores por Pérez y D. Buonanotte por Orellana; 84’, J. Salas por Díaz y B. Garrido por Salinas.
Everton (2): F. Torgnascioli; V. Vega. R. Echeverría, D. Oyarzún; J. Espejo, B. Berríos, A. Madrid, A. Henríquez; L. Pastrán; S. Sáez, P. Sánchez. DT: Francisco Meneghini. Cambios: 46’, C. Riquelme por Henríquez, L. Montes por Pastrán y M. Campos por Sánchez; 59’, B. Soto por Vega; 77’, C. Medina por Espejo.
Goles: 10’, Nicolás Orellana (ULC); 33’, Juan Carlos Gaete (ULC); 38’, Juan Pablo Freytes (ULC); 82’, Sebastián Sáez (EVE); 90+9’, Cristián Riquelme (EVE).
Tarjetas amarillas: Passerini (ULC); Torgnascioli (EVE).